El Museo del Prado, ubicado en Madrid, es uno de los museos más importantes del entorno y alberga una extraordinaria colección de obras de arte. Sin embargo, durante la Guerra Civil Española, el museo se vio amenazado y sus valiosas piezas tuvieron que ser evacuadas para protegerlas de los bombardeos y saqueos.
¿Quién bombardeó el Museo del Prado?
En noviembre de 1936, el Gobierno de la República, encabezado por Largo Caballero, ordenó la evacuación de las obras del Museo del Prado. El ejército nacional se encontraba cercando Madrid y la capital estaba siendo bombardeada. El Gobierno decidió trasladarse a Valencia y las órdenes recibidas en el Prado indicaban que las obras debían seguir al Gobierno. Así comenzó una odisea llena de peligros que duraría tres años, durante los cuales las obras maestras del museo recorrerían un país en guerra, llegarían a Ginebra y finalmente regresarían a Madrid en septiembre de 193
El historiador José Calvo Poyato, en su obra el milagro del prado, destaca que la evacuación de las obras del museo fue de carácter político y no necesariamente buscaba salvaguardar los tesoros artísticos. La Oficina Internacional de Museos recomendaba mantener las obras en los museos, protegidas de la mejor manera posible. Incluso los propios técnicos del museo se manifestaron en contra del traslado, argumentando que era preferible dejar las obras en su lugar, a pesar de los riesgos de los bombardeos.
Aunque Madrid estaba siendo bombardeada, Calvo Poyato señala que en ese momento los bombardeos no habían alcanzado el museo ni sus alrededores. Por lo tanto, los riesgos del traslado fueron evidentes y algunas obras sufrieron daños durante el proceso. Por ejemplo, al cruzar el puente sobre el Jarama de Arganda, el cuadro de Las Meninas fue demasiado alto para pasar en el camión y tuvo que ser transportado a mano en plena noche de diciembre. Además, durante su paso por Benicarló, Los fusilamientos de la Moncloa de Goya sufrió daños cuando un balcón se desplomó sobre el lienzo. Incluso en Cataluña, las obras fueron guardadas en lugares que también servían como depósitos de municiones. El cruce de la frontera hacia Francia se realizó en carreteras llenas de personas huyendo de la guerra, lo que aumentó los riesgos para las obras.
Muerte de leoncio prado: su sacrificio en la guerra del pacíficoLos héroes de esta aventura, según Calvo Poyato, son los técnicos que acompañaron a las obras en su viaje, como Timoteo Pérez Rubio. Gracias a su dedicación y esfuerzo, las obras lograron sobrevivir y regresar al museo, a pesar de los daños sufridos durante la guerra.
¿Cuál fue la finalidad del traslado?
Aunque no se puede afirmar con certeza cuál fue la finalidad del traslado de las obras del Museo del Prado, Calvo Poyato plantea algunas teorías interesantes. Durante los mismos días en que se decidió evacuar las pinturas, también se decidió trasladar las colecciones de monedas de oro y plata del Gabinete Numismático del Museo Arqueológico Nacional. Esta colección se perdió para siempre. Además, un decreto reservado de abril de 1938 estableció que todas las obras del Prado y el patrimonio histórico artístico pasarían a depender del Ministerio de Hacienda.
Aunque no existen documentos que indiquen claramente la intención de vender las obras para sufragar el gasto de la guerra, el hecho de que el decreto fuera reservado sugiere que podría haber habido intenciones ocultas. En ese momento, la comunidad cultural estaba preocupada por el destino de las obras de arte, por lo que esta teoría no puede descartarse por completo.
Guerra contra el arte
La Guerra Civil Española tuvo un impacto negativo en el patrimonio artístico y cultural del país. En los primeros meses de la guerra, hubo ataques caóticos contra monasterios y templos, lo que resultó en la pérdida de muchas obras religiosas. Sin embargo, un grupo de intelectuales republicanos solicitó al Gobierno la creación de una junta para proteger el patrimonio, y esta junta comenzó a funcionar rápidamente para frenar los daños. Además, se llevaron a cabo campañas educativas para concienciar sobre el valor del arte y su importancia para España.
Goya en el prado: la quinta del sordo - historia y pinturasEn la zona republicana, hubo pérdidas significativas, pero las autoridades reaccionaron y trataron de proteger las obras. En la zona nacional, sin embargo, las autoridades apenas se preocuparon por la cultura, lo que llevó a un deterioro aún mayor del patrimonio artístico durante la guerra.
La Guerra Civil Española representó una amenaza para el Museo del Prado y su valiosa colección de obras de arte. La evacuación de las pinturas fue una medida necesaria para protegerlas de los bombardeos y saqueos. A pesar de los riesgos y daños sufridos durante el traslado, las obras lograron sobrevivir y regresar al museo después de la guerra. Sin embargo, el propósito real del traslado aún genera debate y especulaciones.
El legado de la Guerra Civil Española en el Museo del Prado es un recordatorio de los peligros que enfrenta el arte en tiempos de conflicto y la importancia de proteger y preservar nuestro patrimonio cultural. El Museo del Prado sigue siendo un símbolo de la riqueza artística de España y una visita obligada para todos los amantes del arte.
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